En bici desde el Alamillo, hacia el puente de Triana,
Escucho un saxo, me paro, ensaya un saxofonista, suena bien.
Frente a mi, al otro lado del río el Pabellón del Futuro.
Pasa gente: en bici, corriendo, entrenando, adelgazando o paseando.
Hace un rato he dejado atrás a unos pescando,
Ahora veo pasar entre los juncos de la ribera un par de piraguas.
Suena triste el saxo.
Bajo el puente de la Barqueta unas niñas buscan nidos de las palomas. Yo no los veo.
Más adelante alegres en el césped meriendan unas familias con sus niños aún chicos. Juegan, gritan, crecen.
Continuo mi ruta, y cerca ya del puente de Triana, una chica, adornada por las adelfas en flor, lee plácidamente un libro del que me hubiera gustado preguntarle el titulo.
Casi en el puente, cerca y lejos de la “Sevilla del turismo”, que poco a poco va ocupando todos los espacios, grupos de jóvenes se juntan en torno a uno que toca la guitarra, otros charlan, otros que fuman el olor les delata, algunas parejas miran el río y dicen adiós a los últimos rayos de sol.
Estas imágenes, en plena y aburrida campaña electoral, me traen a la memoria los carteles que Jose Ramón hizo para la campaña del PSOE en una de las primeras elecciones. Carteles que inspiran proyecto, ilusión, animo, alegría, …
Me hubiera gustado subir algunas imágenes más de aquellos carteles y mejores que estas, pero son las que he encontrado en Internet.